No creo que exista ningún tipo de garantía para ninguna operación en la tierra, si ni firmando un contrato puedes estar seguro que se cumplirá, ¿cómo podría confiar en la simple palabra de un mortal? Bien, he aprendido a no esperar nada de nadie, o si así es (porque algunas veces es inevitable), a disfrutar (dentro de lo posible) lo que pueda venir; y si algo no me gusta o no me es suficiente bajo ninguna perspectiva, pues me alejo, camino para el otro lado porque nadie me obliga a quedarme a sufrir lo que no quiero sufrir.
Aunque este último punto tiene una salidita interesante, porque el exceso de "irme cuando no me guste" es igual a falta de tolerancia. ¿Por qué? Bien, pensemos en el México de hace emmmmm 60 años, cuando nuestras abuelas o eran pequeñas o estaban casándose, una vez casadas, ¡Bye! ya no te queda de otra mamita, te aguantas al hombre que "escogiste"; si te sale cabrón, si te sale promiscuón, si te sale golpeador, si te sale borracho... ¡Aguántese! ¡Usted se casó! Entonces esas mujeres aguantaban cuanto les hiciera (o no) el marido, dejándonos ver relaciones de 70 años hoy.
¿Qué pasa hoy? ¿Por qué mi prima se divorció a los 2 años de casada? Hoy en día todos estamos en condiciones muy similares en cuanto a oportunidades ¿no creen? todos trabajamos, todos obtenemos dinero, todos somos independientes, entonces: ¿Por qué te voy a aguantar si no necesito nada de ti?.. Ahí reside el error, al creernos completamente autosuficientes podemos enfermarnos de orgullo e intolerancia, porque "no tengo porque aguantarte", ya no sabemos solucionar los problemas, si tú gritas, yo grito mas.
Entonces en lugar de tratar de resolver algo, mejor lo dejo; si me molesta algo, ¿para qué sufro? mejor o te vas o me voy. El aprender a solucionar problemas en pareja creo que es justamente lo más complicado de tener una pareja, cuando la miel se acaba y empiezan a salir esos detalles que antes ignorabas, cuando se termina el enamoramiento y es momento de poner a prueba el amor.
En mi caso, mi relación ha estado llena de carcajadas, problemas, risas, peleas y demás emociones naturalmente humanas, sólo que hay una pequeña y GRAN diferencia (al menos a mi parecer) con muchas otras relaciones; dado que nuestra única política es HONESTIDAD, nos hemos ahorrado infinidad de problemas y tenido muchos otros, algunos por pendejadas y orgullitos, pero, una vez solucionado dicho problema, no se vuelve a presentar, ¿Por qué? Porque no estamos luchando contra mentiras, sino no contra realidades, fusionando nuestras realidades, adaptándolas, no ocultando aquello que no nos gusta.
Tendemos a ver a nuestra pareja como propiedad, como algo mio, y hasta donde me acuerdo, y como dice un amigo mio, a mi jamas me pasaron la factura endosada de mi pareja ¿o sí? Estamos juntos por convicción, porque queremos, no porque nos obligamos a sentir algo que no, o dejo de ser quien soy o como soy por él. Claro, todos nos transformamos al estar con alguien, pero eso de negarte, nomás con nosotros no.
Cuando esa libertad absoluta existe, y digo libertad, no libertinaje, algo más puro nace, algo quasi perfecto, dejas de exigir fidelidad y aprendes que la lealtad vale mucho más. No, no es lo mismo. Obligar a alguien a que no te ponga el cuerno es como amarrarlo ¿no? Bueno, mañana hablamos de eso...
Entonces en lugar de tratar de resolver algo, mejor lo dejo; si me molesta algo, ¿para qué sufro? mejor o te vas o me voy. El aprender a solucionar problemas en pareja creo que es justamente lo más complicado de tener una pareja, cuando la miel se acaba y empiezan a salir esos detalles que antes ignorabas, cuando se termina el enamoramiento y es momento de poner a prueba el amor.
En mi caso, mi relación ha estado llena de carcajadas, problemas, risas, peleas y demás emociones naturalmente humanas, sólo que hay una pequeña y GRAN diferencia (al menos a mi parecer) con muchas otras relaciones; dado que nuestra única política es HONESTIDAD, nos hemos ahorrado infinidad de problemas y tenido muchos otros, algunos por pendejadas y orgullitos, pero, una vez solucionado dicho problema, no se vuelve a presentar, ¿Por qué? Porque no estamos luchando contra mentiras, sino no contra realidades, fusionando nuestras realidades, adaptándolas, no ocultando aquello que no nos gusta.
Tendemos a ver a nuestra pareja como propiedad, como algo mio, y hasta donde me acuerdo, y como dice un amigo mio, a mi jamas me pasaron la factura endosada de mi pareja ¿o sí? Estamos juntos por convicción, porque queremos, no porque nos obligamos a sentir algo que no, o dejo de ser quien soy o como soy por él. Claro, todos nos transformamos al estar con alguien, pero eso de negarte, nomás con nosotros no.
Cuando esa libertad absoluta existe, y digo libertad, no libertinaje, algo más puro nace, algo quasi perfecto, dejas de exigir fidelidad y aprendes que la lealtad vale mucho más. No, no es lo mismo. Obligar a alguien a que no te ponga el cuerno es como amarrarlo ¿no? Bueno, mañana hablamos de eso...
Me espero al post sobre la fidelidad para descoserme. :)
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